conociendo los terrenos

Le miré con una mezcla de preocupación y confusión.

- ¿A qué te refieres con sentirte incómodo? - le pregunté - ¿Te encuentras mal?

Ni él parecía saber que pasaba.

- ¿O es que has notado algo extraño? - insistí, sabiendo que a veces a Ryan le pasaba.

Me di cuenta de que le había hecho demasiadas preguntas seguidas, pero no le di importancia.

La miré confuso.


- Es...no lo sé - comencé - primero pensé que había notado algo, pero...realmente creo que es por él - dije mirando de reojo al nuevo, que seguía con la pelota - hay algo en el que no me da buena espina...voy a ir un momento al vestuario, ten cuidado con el - dije dándole un leve beso en la mejilla y alejándome hacia los vestuarios, necesitaba un poco de agua fría.

vi como ryan se iba haci LOS vestuarios ,baje tarnuilamente a hablar cn lilith :¿ le ha pasado algo?

Ryan se acercó a mi y me dio un beso en la mejilla, luego, dejándome aún más confusa que al principio, se marchó a los vestuarios. Tuve la tentación de ir tras él, pero en ese momento Hector descendió hasta quedar a mi lado. Me giré hacia él.

- Creo que va a refrescarse - respondí - Bueno, ¿viste como al final no se te da tan mal esto del Quidditch? - comenté con una sonrisa, cambiando a un tema un poco más agradable.

si la verdad me he dado cuenta que se me da bastante bien , mucho mejor de lo que me imaginaba , dije con una sonrisa

Estaba en el vestuario. Había metido la cabeza debajo del grifo de agua, por lo que ahora me chorreaba por la cara y la nuca, haciendo que se me mojase toda la camisa. Estaba bastante confuso, no sabía porqué me sentía tan raro estando con Hector, pensé que quizá solo fuesen cosas mías.


Decidí salir del vestuario y cuando llegué a la puerta les ví hablando, así que me decidí a agazaparme entre las sombras a escuchar, a ver si así descibría algo que explicara mi mal royo hacia Hector.

Sonreí de lado entre las sombras. Ahí estaba, ya entendía por qué me sentía así, es más, ahora su cara empezaba a recordarme a alguien, quizá hubiera visto a sus padres en algún enfrentamiendo con los suyos. Tras meditar un momento supe que para Lilith aquello no iba a ser ninguna amenaza aunque no sabía como iba a tomárselo, así que antes de que hablara salí de mi escondite dirigiéndome a los chicos.


- Ya estoy de vuelta - dije, con una expresión seria en la cara.

estaba hablando cuando de repente aparecio ryan , le mire y dije:¿ te ha pasado algo? esq como te has ido de repente

Cuando Hector cambio a ese tema de conversación me puse muy tensa. Iba a replicarle con furia contenida cuando Ryan apareció, cosa que intenté agradecerle con una mirada pero que me fue prácticamente imposible. Esperé que el repentino descontrol de mi magia no se notara, pero estaba segura que a la mínima saltaría.
Esbocé una sonrisa falsa, que se congeló en mi expresión.

- ¿Te encuentras mejor, Ryan? - mi voz sonaba controlada.

Noté la tensión de Lilith y supe que había acertado en acercarme. Me giré hacia Hector.


- Solo estaba un poco...mareado - dije - supongo que no desayuné bien, pero ya estoy mejor.

Luego miré a Lilith tratando de que con mi mirada se relajase un poco, pues sabía que a la miníma saltaría y yo no quería presenciarlo.

Noté la mirada de Ryan y suspiré, no debía actuar así, por lo que relajé los puños que había mantenido hasta ahora incoscientemente apretados. Luego, tranquilamente, y con un absoluto control de mis reacciones, me pasé una mano por el cabello, aireándolo y provocando a la vez que este reflejara los dorados rayos del sol. Sonreí simpáticamente.

- Bueno, chicos, tengo algunas cosas por hacer - comenté - Me voy a ello.

Dicho esto me alejé caminado con pasos elegantes y gráciles. Finalmente, me giré levemente y les hice un desenfadado gesto con la mano acompañado de una sonrisa, en señal de despedida.

Saludé con la mano y una amplia sonrisa dibujada en la cara cuando se fue, aunque suponía que realmente no era ese el motivo de su marcha.


- Vaya, parece que nos hemos quedado solos - dije, dirigiéndome a Hector.